martes, junio 05, 2012

5 de Junio de 2012

DIARIO DE MALLORCA

La Armada se queda sin submarinos

El ´Galerna´, que era el único que estaba disponible, colisionó durante la maniobra de atraque en el muelle de cruceros para abrirse a las visitas al público el fin de semana y los daños provocaron una fuga de combustible

06:50

ANDRÉS TORRES MURCIA
Ad utrumque paratus (Preparados para todo). Ese es el lema del arma submarina de la Armada española, que contrasta con el hecho de que desde el pasado fin de semana se haya quedado sin ninguno de sus sumergibles disponible. El Galerna era el único operativo estos días, pero el sábado se trasladó de su base en el Arsenal de Cartagena al muelle de cruceros para abrirlo a las visitas al público y, durante la maniobra de atraque, colisionó con el pantalán del muelle y, al parecer, sufrió daños en el casco y una pequeña fuga de combustible.

Inspeccionado por buzos

La avería fue suficiente para que el jefe de operaciones de la Base de Submarinos decidiera su regreso al Arsenal, después de que unos buzos inspeccionaran el estado del casco. De este modo, se suspendieron las visitas a esta nave que, ahora, tendrá que repararse para que vuelva a estar completamente operativa.
El Galerna es uno de los tres submarinos que posee actualmente la Marina española, después de que hace años se dieran de baja los cuatro de la vetusta serie 60 y de que ya se haya aprobado retirar de la lista de buques oficiales el Siroco a finales del presente mes de junio, debido a la falta de fondos para acometer su gran carena, una profunda revisión y sustitución de sus equipos necesaria y obligatoria para prolongar su vida útil sin riesgo para sus tripulaciones.
Los dos restantes submarinos de la serie 70 son el Mistral y el Tramontana. El primero de ellos está actualmente en plenas obras de la gran carena en Navantia, mientras que el segundo está en una parada programada para una revisión más sencilla equivalente a una ITV del coche que se lleva a cabo cada tres o cuatro meses y que dura aproximadamente un mes.
La escasez de unidades y su ´edad´, están cerca de cumplir los 30 años en activo, hacen prever que estas dificultades se prolonguen hasta la entrada en servicio la nueve serie 80, prevista para 2015.

LA VOZ DE GALICIA

Salvamento exhibe en Marín su poderío en emergencias marítimas
 
El simulacro incluyó un dispositivo contra la contaminación marina

Marcos Gago


marín
/ la voz 05 de junio de 2012 05:00

Colisión de pesqueros en la ría de Pontevedra con dos personas que caen al mar y dependen de medios aéreos para un rápido rescate. Un vertido de combustible producido por el naufragio de un barco y que amenaza la ría. Estas situaciones se simularon ayer entre Marín y Tambo en un ejercicio de Salvamento Marítimo, pero son situaciones que podrían darse en cualquier momento.

Precisamente por esa razón todos los implicados en el operativo quieren estar al día. El director de Sasemar, Juan Luis Pedrosa, lo recalcó minutos antes de subir al remolcador de altura María Pita, de Salvamento Marítimo. Consciente de que en una situación real hay muchos otros factores en juego, Pedrosa destacó la importancia de estos ejercicios: «Tenemos que estar preparados». El director general de Operaciones de Sasemar, Xaquín Maceiras, incidió en la misma idea: «A xente sempre responde mellor cando está adestrada».

El operativo comenzó pasadas las 11.30 horas. Autoridades y prensa se adentraron en la ría a bordo del María Pita, mientras que el buque polivalente Don Inda, con base en Cee y la joya de la corona de Sasemar, cuya actividad se ha reducido a la mínima expresión dado el elevado coste que supone movilizarlo, llevaba dentro a los alumnos de la escuela náutica de Bueu. Sus profesores consideraron que este ejercicio práctico hablaría por sí solo de la importancia de la seguridad en el mar.

El supuesto choque de barcos se escenificó entre Tambo y el puerto. La respuesta a la señal de humo naranja y a la alerta del 112 fue rápida y poco tiempo después el Pesca 1, de la Xunta, recogió a los dos náufragos en un movimiento rápido y de precisión. En cinco minutos, la tripulación del Pesca 1 quitó a los dos marineros del agua y los trasladó a tierra.

El simulacro continuó con el despliegue de las barreras anticontaminación desde el Don Inda, con la ayuda de la Salvamar Mirach. La demostración también contó con un skimmer, una máquina diseñada para la succión de combustibles. A las 13.30 horas, el ejercicio se dio por terminado con todos los objetivos cumplidos.

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